La figura es una de las esculturas humanas más antiguas del mundo. Se encontró en 1939 en la cueva Stadel en Hohlenstein, cerca de Asselfingen, Alb-Donau-Kreis en Alemania, en el nivel IV. El original está ahora en exhibición en el Ulmer Museum (Museo de la Ciudad de Ulm).
La escultura de 29,6 cm de alto, 5,6 cm de ancho y 5,9 cm de espesor, está tallada en marfil de colmillo de Mamut.
Datada por carbono 14 y otros medios en 32.000 años, perteneciente al periodo Auriñaciense.
La primera excavación arqueológica sistemática en la cueva Stadel comenzó 1937 y se llevaron a cabo por el Prof. Robert Wetzel, pero terminó abruptamente al comienzo de la Segunda Guerra Mundial. Los hallazgos fueron almacenados provisionalmente y no se analizaron científicamente. La figura fue descubierta el 25 de agosto de 1939, el último día de las excavaciones en forma de cientos de pequeños fragmentos por Otto Völzing y Robert Wetzel.
El hecho de que los fragmentos pertenecían a una figura fue descubierta en 1969 por el Prof. Dr. Joachim Hahn, un arqueólogo de Tubinga, mientras que hacer un inventario de los hallazgos.
La figura estaba fragmentada en cerca de 200 pequeñas piezas pero consiguió descubrir que estaban relacionadas por su similitud y comenzó a recomponer la figura.
Cuando terminó esta mostraba a una persona de pie, con características humanas y animales. El cuerpo humano tiene la cabeza de un león de las cavernas. Hahn interpretarse que se trata de una rara evidencia de la mística-religiosa de la imaginación de los habitantes del paleolítico.
Hace algunos años el examen científico de la escultura fue rehecho completamente por Elisabeth Schmid. Algunos huesos más, encontrados durante la excavación original, podrían añadirse a la figura. Principalmente la cabeza y el segundo brazo se completaron.
Joachim Hahn interpretó la figura como masculina. Elisabeth Schmid basándose en ciertos detalles la interpretó como femenina. En conjunto no hay pruebas objetivas para el género de la figura y el debate es más o menos ideológico.
Pero los brazos de la figura parecen patas, y las proporciones del cuerpo humano no lo son realmente. Los pies humanos podría interpretarse como ingenua o no representación de un animal. Otra posibilidad, es que podría tratarse de brujos con máscaras animales como los existentes en ciertas pinturas paleolíticas realizados en varias cuevas, es decir sería una persona con una máscara de León.
Fuente:
Showcaves