Uso Selectivo de Herramientas, algunas Multiuso, en Chimpancés

Uso Selectivo de Herramientas, algunas Multiuso, en Chimpancés



No hay que olvidar que compartimos el 96% de los genes.

Un equipo de primatólogos dirigido por Christophe Boesch del Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva de Leipzig, Alemania, ha estudiado el comportamiento de un grupo de Chimpancés que viven en el Parque Nacional de Loango en Gabón.

Han descubierto que estos chimpancés fabrican hasta 5 instrumentos distintos para obtener la miel de las colmenas dependiendo de la estructura y ubicación de la misma, y del fin que se quiera conseguir con él:

• 1) Utensilio delgado y recto para sondear el terreno en colmenas subterráneas.
  
• 2) Utensilio de cierto grosor y romo para realizar un agujero en la entrada de la colmena.
  
• 3) Utensilio delgado y con cierta forma de pala para romper las paredes interiores de la colmena.
  
• 4) Utensilio con los extremos deshilachados para mojar la miel en colmenas abiertas.
  
• 5) Utensilio cuchara fabricado con corteza de árbol.

Estas herramientas se encuentran a menudo cerca de la misma colmena, lo que indica que han sido utilizadas de forma secuencial.

Algunas de estas herramientas parecían tener dos usos, cada uno en un extremo, lo que sería el primer ejemplo de herramienta multiuso en una especie distinta a la nuestra.

Varias de estos utensilios requieren para su fabricación de varias acciones coordinadas y además utilizar el conjunto de herramientas como parece ser que sucede implica una planificación de futuro importante.

Cuando los Chimpancés sondean la tierra en busca de miel en las colmenas subterráneas, afirma Boesch, están concibiendo objetos invisibles, habilidad esta, desarrollada por los humanos en los primeros pasos como especie, cuando comenzamos a fabricar industria lítica. Boesch va más allá y se atreve a aventurar que el proceso de obtener miel también se dio en nuestra especie y fue uno de los factores que influyeron para desarrollar una inteligencia superior, una afirmación una tanto Golosa!

Fuente:

New Scientist