Multiverso, nuestro universo como una gota dentro de un mar de mundos posibles Imagen: Recreación del Multiverso, una de las burbujas correspondería al universo en que habitamos, una simple gota en un mar de universos posibles | Vía Investigación y Ciencia
Según la teoría cosmológica más aceptada por toda la comunidad científica, nuestro universo se formó a partir de una región microscópica de un vacío primordial mediante un estallido de expansión exponencial o inflación. Desde hace un tiempo, están tomando cada vez más fuerza y se está convirtiendo en campos legítimos de estudio, la teoría de que este mismo proceso inicial podría estar generando continuamente otros universos, cada uno de ellos con sus propias leyes físicas, pudiendo ser algunos de ellos tan habitables como el nuestro, se trata de las teorías del Multiverso.
Sean Carroll es uno de esos físicos, que defiende la teoría del multiverso. Sus argumentos a favor de una nueva teoría del tiempo y su excelente capacidad divulgadora le han catapultado a la fama en Estados Unidos, tras la publicación de su último libro “From Eternity To Here; The Quest for the Ultimate Theory of Time.”
Sean Carroll desafía los límites de la comprensión humana con una nueva teoría del tiempo. En nuestro mundo el tiempo sólo sigue una dirección: de pasado a futuro, y se caracteriza por la irreversibilidad, si un vaso de cristal de una mesa cae irremediablemente se va a descomponer en cientos de pedazos, si esos pedazos de cristal cayesen de la mesa jamás se unirán para formar el vaso. ¿Por qué? Por la entropía, el desorden al que tiende el Universo.
Hace bastantes años, mis costumbres nocturnas me permitían escuchar en la radio un estupendo programa de nombre “Si amanece Nos Vamos”, dirigido por Roberto Sánchez, en él, había una sección dedicada a preguntas y respuestas que planteaban y resolvían los oyentes. Un oyente planteó medio en broma por qué los cascos del walkman siempre acababan enredados cuando se metía en la cama a escuchar el programa, si él no hacía nada, y sin embargo al cabo de cierto tiempo estaban completamente liados y entrelazados. En ese momento me pareció una pregunta tontísima, nada más lejos de la realidad, con el tiempo me he dado cuenta de que no hay pregunta más estúpida que la que nunca se plantea. La respuesta a la pregunta la obtuve al cabo de los años, se trata de una característica propia de nuestro universo y es atribuible a todo él: cada vez es más desordenado, hoy más que ayer y ayer más que el día anterior, así hasta remontarnos hasta sus "inicios", hace 13.500 millones de años, cuando surgió a través del Big Bang en un estado de muy baja entropía, o mucho orden.
Según Sean Carroll: un sistema muy caliente y altamente denso, capaz de albergar 100.000 millones de galaxias con 100.000 millones de estrellas cada una (como hay ahora), necesita mucho orden para mantenerse en un "espacio compacto". Desde entonces, el Universo no para de expandirse. ¿Hacia dónde? Hacia el infinito. ¿Hasta cuándo? Hasta el infinito. No hay fin.
Los físicos creen que en un gúgol de años (10 elevado a 100), el Universo se vaciará por completo: todos sus elementos habrán caído en los agujeros negros, e incluso los agujeros negros se habrán disuelto. Y aun así, continuará expandiéndose. Sin embargo, los físicos también saben que incluso el vacío guarda cierta cantidad de energía, la energía oscura, y la física cuántica nos dice que siempre quedarán partículas pululando. Suficiente como para que, después de muchísimo tiempo, un pequeño espacio del Universo vacío se desprenda como una gota: puede ser independiente, o puede estar contenido dentro del Universo materno, pero será el nacimiento de un nuevo Universo. Un Big Bang, que por leyes naturales tendrá muy baja entropía y empezará a enfriarse y a expandirse hasta vaciarse, para dar lugar, mucho tiempo después, a un nuevo Universo, y así sucesivamente, hasta el infinito.
Para Carroll el vacío es, en realidad, el estado natural de las cosas, y nosotros somos una excepción nacida de las fluctuaciones aleatorias de la energía. Si de algo dispone el Universo, o los universos o multiversos, es de tiempo. Con suficiente tiempo se pueden obtener todo tipo de combinaciones posibles. Incluso que una tortilla pueda volver a ser huevo. Pero se necesitaría mucho más tiempo del que lleva existiendo nuestro Universo.
El tiempo tiene una dirección, de pasado a futuro, debido a que el Universo tiende a tener cada vez más desorden.
¿Y cómo es el tiempo en un Universo vacío? El tiempo existe aunque no haya nadie ni nada para experimentarlo. Es una coordenada, como lo es el espacio. Y a este respecto, las leyes físicas no hacen distinción entre pasado y futuro; no hay flecha del tiempo en las leyes fundamentales de la naturaleza. Las cosas podrían ocurrir simultáneamente en otro Universo distinto al nuestro, o fuera del nuestro. Los físicos hablan de equilibrio térmico cuando no hay flecha del tiempo, cuando la entropía es siempre la misma. Entonces es todo estático, nada cambia.
Según explica Sean Carroll, del Big Bang para acá el tiempo ha seguido una dirección: de pasado a futuro. Pero no hay nada que impida pensar que, del Big Bang para atrás, la flecha del tiempo siguió la dirección opuesta, o más bien simétrica. Y del mismo modo en que, para nosotros, todo lo que pudo haber antes del Big Bang es un pasado muy remoto, nosotros somos un pasado muy remoto para los Universos que nacieron en dirección opuesta.
¿Qué tal?, os sentis menos solos ahora, o os agobian las multitudes...
Fuente:
Investigación y Ciencia – Buscando vida en el Multiverso por Alejandro Jenkins y Gilad Pérez
El Mundo