Los Placodermos y el Origen de la Cópula en Vertebrados Imagen: A la izquierda en a y b, recreación del placodermo
Materpiscis attenboroughi el primer vertebrado conocido del que se tiene constancia de viviparismo, (desarrollo del embrión en el vientre materno), y a la derecha recreación del placodermo australiano
Austrophyllolepis, el primero del que se tiene constancia que practicaba la cópula para su reproducción, como así lo atestigua la presencia de abrochadores en algunos fósiles | Composición por LaBaracA, Imagen de
Materpiscis Vía: Diario de un Copépodo, Imagen de Austrophyllolepis Vía: Museum Victoria
Los placodermos vivieron hace 375 millones de años en los mares del Devónico tardío. Estos peces primitivos forman parte del linaje que dio lugar a los animales de cuatro patas, tetrápodos, entre ellos los humanos.
Sabemos gracias a los fósiles de distintas especies de placodermos, que fueron los primeros vertebrados que copulaban para su reproducción y que parían a sus crías vivas, un método revolucionario en aquel tiempo remoto, ya que la mayoría de las especies ponían huevos en el agua que a continuación eran fecundados para comenzar a desarrollarse, esta forma de reproducción y desarrollo es conocida como freza.
La freza permite un mayor número de descendientes frente al viviparismo, pero el desarrollo de las crías era mucho mayor con el parto materno. Las crías nacían mucho más desarrolladas y vigorosas, lo que las permitía sobrevivir de los numerosos depredadores presentes en los peligrosos mares del Devónico. Este modo de reproducción confirió una ventaja fundamental que aseguró el éxito de los placodermos vivíparos.
Se han encontrado fósiles del placodermo australiano
Austrophyllolepis, que presentan abrochadores, un apéndice carnoso de la cintura pélvica que introducían en la hembra, uno cada vez, para inseminarlas con su esperma. También se descubrieron fósiles de distintos placodermos, como
Materpiscis, que contenían embriones, lo que probaba que estos peces parían crías vivas, en lugar de poner huevos como hasta entonces era la norma general.
Las aletas pélvicas, abrochadores, con el tiempo evolucionarían hasta convertirse en nuestros genitales y patas posteriores de los tetrápodos, las mandíbulas habrían surgido inicialmente para ayudar a los peces macho a sujetar a las hembras durante el apareamiento, millones de años más tarde habrían adquirido la función de procesar el alimento, esta nueva forma de reproducción produjo cambios insospechados en las venideras especies.
Hasta hace 3 años se pensaba que la fecundación interna en los vertebrados, surgió hace 350 millones de años, en el grupo de los tiburones y sus afines, los nuevos fósiles de los placodermos mencionados han retrasado hasta los 375 millones de años esta forma de reproducción, tan relacionada con nuestra especie.
Los fósiles encontrados demuestran que al menos dos de los siete grupos principales de Placodermos, entre ellos el de mayor éxito, se reproducían mediante cópula.
Fuente:
Investigación y Ciencia – Origen de la copulación, Autor: John A. Long
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